El fracaso de tu primer emprendimiento no tiene porque ser una derrota definitiva.
💖El inicio de un emprendedor lo defino, desde mi óptica, como un enamoramiento, como los primeros días de una relación de amor, donde hay tantos planes e ilusiones en torno al negocio y sus perspectivas a futuro. En mi caso, mis planes giraban en torno a él, en mi afán de conseguir mi libertad financiera y salir de lo convencional, a través de un negocio propio, que sería de gran renombre y reputación y que pudiera venderlo supervalorado con respecto a mi inversión inicial, siempre enfocada en que me gustaba y apasionaba lo que hacía y que no importara el esfuerzo, mientras hagas lo que te hace feliz.💖
“Ya no trabajas para otra persona, pero sigues trabajando por dinero y aún hay un tramo largo que recorrer para lograr tener independencia económica. El autoempleado es vendedor, contador, cobrador, diseñador, administrador y hasta mensajero, etc. Ellos son el negocio, y si el autoempleado no trabajan, el negocio no genera ingresos”.
Lo ideal es crear un sistema integrado entre las partes operativas del negocio, crear manuales de prácticas a aplicar ante diferentes situaciones. El personal, que en teoría debería ser de confianza, esté preparado para ejecutar e ir directo a la acción sin depender de una decisión gerencial, o a menos para las cosas triviales. En base a lo anterior, invertí una considerable suma de dinero en la adquisición de un sistema de software inteligente que pudiera entrelazar la gestión operativa con la administrativa y pudiera llevar el control desde cualquier lugar donde esté. Sin embargo, dicha herramienta, que me fue de gran utilidad durante la existencia del negocio, fue excesiva para el inicio de un emprendimiento, sobretodo en el escenario donde la parte económica era escaza y casi dependía de las ganancias que se fueran generando para poder subsistir. Este puede considerarse el segundo gran error, aunque todavía me cuesta admitirlo porque esa herramienta me hizo la vida menos dura, es decir, pudo haber sido peor.
El tipo de negocio que inicié requería establecer muchos controles ya que el servicio ofrecido tenía muchos gastos asociados antes de satisfacer la necesidad del cliente final, así que estaba sobreentendida la confianza al personal ya que no había otra opción.
Aparte de la inversión del software inteligente como parte de mi sueño dorado para alcanzar el éxito, también tenía como estrategia que la posición de Gerente de Operaciones sería un experto en la parte medular del negocio, al que le otorgaría una fracción mínima accionaria como incentivo para sacar la empresa adelante. Hacerlo parte de la empresa sería un agente motivador con la intensión de incrementar, con el paso del tiempo, el capital accionario a expensas del éxito del negocio, hasta su completa venta de la mayoría de las acciones, una vez la misma alcanzara el estrellato.
La luz en mi estresado camino como gerente de mi propio negocio:
LA LECTURA
Por qué esta historia tiene un final no tan feliz???
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Manejo de Personal: No quiero sonar radical, pero no quiero volver a trabajar o depender de la contratación de personal. Actualmente, dependo nuevamente del 15 y 30 de cada mes para poder vivir (volví a ser asalariada luego del cierre definitivo de la empresa y ahora los cambios que he venido implementando en mi vida son para dejar de trabajar para alguien más) pero mi próximo emprendimiento no requerirá de personal. Dirán que soy una persona asocial pero no tiene que ver con mi personalidad, sino que la destreza, delicadeza, entendimiento, manejo e inteligencia para tratar al personal no forma parte de mis intereses de formación actual. (Ahora creo 100% en la formación y auto enseñanza para emprender cualquier reto)
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Perder dinero: Siempre que invertimos corremos el riesgo de perder dinero, independientemente del tipo de negocio o inversión que iniciemos, pero minimizaré absolutamente el riesgo mediante la educación, la autoformación, la lectura y sobretodo el poner en práctica, mediante planes pilotos, mis grandes ideas antes invertir sumas significativas en ellas. ENSAYO Y ERROR.
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Tiempo: Manejo más eficaz del tiempo. Durante el funcionamiento del negocio perdí tanto tiempo en cosas que no generaban mayor productividad, no supe seleccionar correctamente las cosas que tenían prioridad y cuando iba a atender lo verdaderamente importante mi cansancio mental no me permitía tomar las mejores decisiones.
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Clientes: Por el desespero de obtener clientes a como dé lugar, no le di el verdadero valor a mi trabajo y al servicio que estaba ofreciendo. Cedía con facilidad a las tarifas que los clientes decidían que iban a pagarme por desespero, sin que eso reportara un flujo constante de servicios por parte de ese cliente, restándole atención a los clientes verdaderamente importantes y que eran los que me generaban mayores ingresos. Famosa Ley del 80/20.
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Pagarme a mí misma: Asignarte un salario que formen parte de los gastos fijos, y pagarlo como si fuera el alquiler o el salario de cualquier otro empleado, es algo que no puede faltar jamás. Ver cómo pasan los meses y no recibas ni un medio por todo el esfuerzo que dedicas a tu negocio es bastante desconsolador, y económicamente te pone en una situación difícil ya que no solo tienes el estrés del día a día con el quehacer operativo, sino que dedicas esfuerzo mental al tema de tus gastos personales.
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Pretender asumir todos los roles: Estaba muy clara de la necesidad de delegar, sobretodo funciones que no eran mi especialidad, pero de verdad que la falta de dinero me puse en jaque mate y no fue fácil hallar la solución de manera inmediata.
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Endeudarme más de lo que podía asumir: Este error lo cometí desde el principio, por mi fe absoluta de que todo iba a salir bien, contraje deuda e incluso aportes que se traducían en dar un porcentaje de las ganancias netas. Esto último jamás lo hagan porque así tengan a alguien que de buena fe crea en ustedes y en su idea de negocio, esa persona que otorga solo capital no va a estar en los momentos críticos ni en las cuestiones del día a día, y asignar porcentaje a la ligera, solo tomando en cuenta el capital invertido, traerá consigo demasiadas frustraciones, que a la larga desvirtuará la relación inicial.
Atte. Virgi
Escrito en Febrero 2018.